Crimen
y Drogas
La
búsqueda de drogas representa un gran riesgo para los drogo-dependientes puertorriqueños.
Ellos deben incurrir constantemente en actividades ilícitas, porque para
drogarse-volarse, hay que pagar y/o arriesgar lo que sea. Es así
que, según nuestro cuestionario de estudio, un 33% de los drogo-dependientes
ha sido arrestado por algún tipo de delito relacionado con la adquisición
de droga (p.e., robo, venta de sexo, venta de jeringuillas, asalto, etc.).
Rubén y Carmen, dos drogo-dependientes veteranos, han contribuido a esta delincuencia,
y según ellos, sin remordimiento. Comentando sobre el estado de un absceso
que tenía en el medio del pecho y que se había causado por una inyección mal
practicada, Rubén dijo
la sociedad no me ha dado lo que yo
he necesitado. Qué otra opción tengo [
] Yo nunca delinquí. Este es un
extremo en mi vida [
] Yo tenía un auto y ayudaba a mi padre a pagar
la hipoteca de la casa, pero de un día para otro toque fondo, y no hubo nadie
ni nada que pudiera rescatarme (Entrevista, Junio 2000).
De
ser un contribuyente a la sociedad, Rubén fue arrastrado al mundo de la criminalidad,
un mundo donde una precaria subsistencia pasa a ser la gran fuerza motivadora.
Este es el drama de casi todo drogo-dependiente en Hartford. En la
noche pensamos como vamos a sobrevivir al dia siguiente, Rubén comentó
en una observación participativa conducida por la etnógrafa del estudio, Yo
voy a robar a las tiendas y le digo a Carmen que me espere en la otra esquina,
por si acaso me agarran [
] Yo escondo la mercadería en mis pantalones
[
] como soy flaco, cabe mucho. Yo robo lo que pillo, desde jabones hasta
herramientas
. Robar y vender lo robado es una estrategia
que en la vida del drogo-dependiente tiene sus recompensas. |