De esta manera, el artículo analiza la inclusión del indígena en la historiografía nacional, refiriéndose a las tendencias de autores como Diego Barros Arana, Benjamín Vicuña Mackena, Francisco Antonio Encina, Mario Góngora, Armando de Ramón, Sergio Villalobos, entre otros. A partir de este recorrido, se señala que la fotografía del indígena está reservada a los momentos en que la tradición historiográfica es cruzada por la problematización respecto a la construcción de la nación. Así, tras una completa ausencia del indígena en la imagen, surgen aquellas que apelan a rasgos más cercanos a lo étnico, a su cosmovisión y diferencia. Junto a esto, se considera la inclusión tardía y problemática de estas imágenes en los textos escolares de historia. De ahí que sea posible detectar anacronismos y estereotipos (sobre todo en el sujeto andino femenino), negaciones a identidades ancestrales, vínculos con la chilenización, desequilibrios entre textos e imágenes, confusiones de contenido, en resumen, una suma de aspectos que dificultan el aprendizaje en la escolaridad.
En quinto y último lugar, Gastón Carreño estudia la visibilización de la etnia chango en grabados y fotografías. En el artículo Sobre balsas y mujeres desvestidas. Representación y estereotipo en la fotografía sobre changos, se da cuenta de que esta etnia tiene aún menos presencia visual que las etnias del interior de la zona sur-andina.