Discurso e imagen sobre el indígena chaqueño.
Mariana Giordano.
Ediciones Al Margen, Buenos Aires, 2005

Si el oficio de la historia tradicionalmente tenía su materia prima en los documentos escritos, el trabajo de la historiadora argentina Mariana Giordano pone en evidencia un nuevo desafío hermenéutico: los documentos visuales. Son precisamente estos elementos, los pilares de su trabajo sobre los indígenas del Chaco: tobas, matacos, mocovíes, lules, vilelas, abipones, chiriguanos, pilagás son vistos bajo el prisma de los discursos institucionales, generados a partir del siglo XIX, construidos según la contraposición de la civilización y la barbarie.

Es en esta conformación de un verdadero “imaginario de la alteridad” chaqueña donde las imágenes visuales juegan un rol protagónico: son las portadoras del discurso de la dominación y del mestizaje cultural al que fueron sometidos los indígenas de Chaco, desde el siglo XVIII hasta las últimas décadas del XX.

Para ello, Giordano utiliza el concepto del Imaginario (especialmente entendido desde el punto de vista de Conelius Castoriadis) como el soporte teórico desde el cual se conforma la apreciación de la alteridad chaqueña. Las representaciones resultantes de este proceso, son analizadas desde el punto de vista de sus diversos emisores (producción), de los formatos (materialidad de la fuente) y de los espacios donde se encuentran estas imágenes (circulación).

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La primera parte se remite a la visión del Chaco desde diferentes miradas y épocas: los misioneros, los militares y los viajeros durante el siglo XVIII. A estas percepciones se agregan otros durante la segunda mitad del XIX y principios del XX: los exploradores, los funcionarios del estado, dando origen a una “mirada oficial” construida desde el poder central y la prensa, que da la entrada a la opinión pública. Complementan y conforman esta mirada sobre el Chaco y sus habitantes, los artistas y, por supuesto, los fotógrafos.

Respecto a una de estas miradas, y a modo de ejemplo, la autora plantea que las imágenes fotográficas de los indígenas, realizadas por los sacerdotes franciscanos y publicadas en libros y/o postales, se convierten en el medio visual de justificación del proyecto misionero. Precisamente el contexto en que se produjeron, el modo y los diferentes soportes en que circularon, hacen que estas imágenes se conviertan en “fuentes de poder” y postulan a los sacerdotes como legítimos portadores de ese poder. El poder de la civilización y la evangelización, representados visualmente.

En la segunda parte, la autora plantea las principales temáticas sobre el indígena chaqueño: la tierra, el trabajo la educación y las costumbres, para culminar con tres esquemas propuestos en la percepción del indígena chaqueño: el civilizatorio, el integracionista y el reparacionista-reivindicatorio.

Uno de los méritos, entre otros, de este interesante trabajo, se refiere a la proposición de una metodología de trabajo que se puede aplicar perfectamente a otras zonas de contacto intercultural, que combina la agudeza en la selección de documentos escritos y la sensibilidad en el análisis de aquellos visuales.

Christian Baez Allende, octubre 2007.

Doctor © en Historia Pontificia Universidad Católica de Chile.

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